Misterio, horror y ciencia ficción bajo las aguas: la conciencia es el tema principal analizado
Misterio, horror y ciencia ficción bajo las aguas: la conciencia es el tema principal analizado
PROS
- Una narrativa profunda y conmovedora
- Ambiente subacuático claustrofóbico y detallado
- Enemigos que incentivan la estrategia y el sigilo en lugar del combate
- Interacción física enriquecedora con el entorno del juego
- Temas existenciales y humanos explorados a fondo
CONTRAS
- Los sustos pueden ser menos intensos en comparación con otros títulos del género
- Los enemigos a veces actúan como meros obstáculos para la progresión
- La tensión puede verse disminuida por la habitualidad de ciertos patrones de enemigos
Un viaje inmersivo a las profundidades del terror
SOMA se presenta como una experiencia de terror y ciencia ficción profundamente inmersiva. Desarrollado por Frictional Games, creadores de títulos reconocidos en el género del horror, este juego transporta al jugador a un escenario subacuático lleno de misterios y horrores psicológicos que desafían nuestros conceptos más convencionales sobre la humanidad y la existencia.
Un mundo sombrío y envolvente
Ambientado en las oscuras profundidades del Océano Atlántico, SOMA nos introduce en PATHOS-II, una instalación futurista donde lo orgánico y lo mecánico convergen de maneras sorprendentes y a menudo perturbadoras. La narrativa del juego comienza con un giro desconcertante, cuando Simon, el protagonista, se encuentra inesperadamente en este complejo submarino tras un escaneo cerebral en la actualidad.
La interactuación con el entorno es un punto fuerte del juego: el acto de manipular objetos físicamente, desde simples herramientas hasta pesadas puertas, genera una conexión tangible y convincente con el avatar digital. Todo ello, unido a mecánicas de sigilo que requieren del jugador cautela y estrategia, sumergen aún más en la experiencia claustrofóbica de SOMA.
Una narración excepcional
La historia es, posiblemente, el corazón de SOMA. A diferencia de protagonistas amnésicos característicos en juegos anteriores de Frictional Games, Simon posee una identidad clara, lo que aporta un impacto emocional más profundo a la narrativa. El viaje explorará temas existenciales complejos, como lo que significa ser humano y cómo percibimos nuestra propia realidad y conciencia.
Los escenarios interiores, cargados de una atmósfera opresiva, alternan con vastas expanses acuáticas que ofrecen un cambio de ritmo y una ampliación de la paleta visual y emocional del juego. Estos exteriores no sólo proporcionan un respiro visual, sino que también plantean nuevas amenazas y desafíos.
El dilema de la existencia y enemigos ambiguos
Enfrentar a Simon y al jugador con preguntas sobre su propia existencia es uno de los hilos conductores de SOMA. Esta constante incertidumbre se refuerza a través de enemigos que bordean la línea entre la mecánica y la biología, entre la vida y algo irreconocible. Dado que la confrontación directa no es una opción, el juego enfatiza la evasión y la inteligencia por sobre el combate.
El diseño de estos antagonistas refleja los temas del juego, presentándolos más como manifestaciones de un dilema moral y existencial que como monstruos tradicionales. Sin embargo, hay momentos en que la presencia de estos enemigos acaba sintiéndose más como un impedimento en el camino hacia el desenlace de la historia, reduciendo el efecto de miedo en favor de avanzar en la narrativa.
Compañeros tecnológicos y alivio narrativo
Para balancear la tensión inherente al setting, SOMA integra elementos narrativos que ofrecen alivio, en forma de IA y comunicaciones a distancia que añaden profundidad a su elaborado argumento. Estos personajes, algunos no humanos, se convierten en compañías dentro de este aislado infierno acuático, motivando al jugador a avanzar en momentos donde la opresión del entorno alcanza su clímax.
Una entrega visualmente refinada
En lo técnico, SOMA mejora notablemente respecto a previas entregas de Frictional Games, ofreciendo gráficos más pulidos y una experiencia con pocos fallos técnicos. Aunque los sustos no sean el núcleo de este juego, la ambientación y el tono general mantienen un aura de inquietud constante que, junto a una historia absorbente, hacen de SOMA una adhesión digna al género de terror de supervivencia.
PROS
- Una narrativa profunda y conmovedora
- Ambiente subacuático claustrofóbico y detallado
- Enemigos que incentivan la estrategia y el sigilo en lugar del combate
- Interacción física enriquecedora con el entorno del juego
- Temas existenciales y humanos explorados a fondo
CONTRAS
- Los sustos pueden ser menos intensos en comparación con otros títulos del género
- Los enemigos a veces actúan como meros obstáculos para la progresión
- La tensión puede verse disminuida por la habitualidad de ciertos patrones de enemigos